Aunque tanto "ugly" como "hideous" se traducen al español como "feo" o "horrible", existen diferencias sutiles en su significado y uso. "Ugly" se utiliza para describir algo que no es atractivo a la vista, que es poco agraciado o desagradable. Es un término más común y menos intenso que "hideous". Por otro lado, "hideous" implica un grado mucho mayor de fealdad; describe algo que no solo es desagradable, sino que además es repugnante, espantoso, o incluso aterrador. Es una palabra más fuerte y se reserva para situaciones en las que la fealdad es extrema.
Ejemplos:
La diferencia radica en la intensidad. Si algo es "hideous", es definitivamente "ugly", pero no todo lo que es "ugly" es necesariamente "hideous". Piensa en ello como una escala de fealdad: "ugly" está en un extremo menos severo, mientras que "hideous" representa el extremo más extremo.
Otro ejemplo:
En el primer ejemplo, "ugly" describe algo simplemente desagradable a la vista. En el segundo, "hideous" describe algo que causa repugnancia por su aspecto.
Recuerda que el contexto es clave. La elección entre "ugly" y "hideous" dependerá de cuán intensa sea la fealdad que quieres describir. Happy learning!